16 Dec
¿A quién le abro las piernas?

De: Jonathan Haller


¿A quién le abro las piernas?

¿Al que anhela mi gemidos?

¿Al que busca un pasatiempo?

¿O al que promete amor sin fronteras?


Ellos mienten con sus lisonjas

para obtener lo que sueñan,

o son claros y sólo quieren follar.

¿Creer en una mentira a medias,

o alabar la sinvergüenza honestidad?


Agotada me siento;

ha sido una larga espera

por hallar al “hombre ideal".

Han pasado los años

y descubrí la estupidez

que escondía mi paciencia,

el candor en la cual

resisto mi virginidad.


¿Acostarme con cualquiera?

¡Seré una puta!

¿Esperar como recluida princesa?

¡Me quedaré sola!


Esta es la problemática

de quién pone la pureza

en un inmerecido pedestal.

El romance, el santo grial

de las mujeres de sociedad.

El sexo, el pecado

que soñamos tocar...


¡Malditas sean 

estas ganas de pecar!

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.
ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO