Ya que en tres días partirá a lejanas y regias tierras... y considerando que hace mucho, mucho tiempo, (algo como casi la tercera parte de nuestras vidas) no nos sinceramos, que después no concretamos una salida a tomar un café y mas recientemente quedó incumplida la promesa de contestar un inbox y platicarme los vericuetos de un auditorio, una zona protegida y un discurso... ¿Alguien podría decirle que, como siempre, le deseo lo mejor?
Y ya que estamos en esas, podrían contarle que fue, es y será la mejor, mi amiga mas sincera... aun cuando tantas veces, dada nuestra lejanía, no se consideró como tal, pero que siempre estuvo en mis momentos mas bajos dando luz donde alguien había sembrado oscuridad...
.... que siempre me arrepentiré de no haberle contestado con la verdad la pregunta que me hizo al final de la primavera de hace cinco años :
- ¿Quien te gusta? Me gustas tú, debí confesar... Y ya que de confesiones se trata, decirle que meses después, en otoño de ese año, volví a faltar a la verdad:
- ¿Cómo sabes mi fecha de cumpleaños? Le dije que por el facebook mas no era verdad: cuando alguien te importa no olvidas los detalles, como su color favorito, que sabor prefiere y obvio, su cumpleaños...
Que aun no se va y ya extraño sus profundos ojos como mar nocturno, su sonrisa limpia y sincera... y que lamento no haber estado a su altura cuando tuvo esa ilusión... que con todo, tal vez fue mejor así. Aunado a la inexperiencia e inmadurez propias de los adolescentes, con el tiempo vi y entendí que somos de mundos diferentes, que hay barreras difíciles de salvar y que supe de las bromas y por ende la presión que tuvo por nuestra amistad... y que agradezco de manera infinita que tras todo eso, todavía se mantenga, así sea de manera virtual por las redes...
Ya abusando de esta larga posdata... que alguien le diga que no podría imaginarme mi vida sin haberle conocido, oído su risa, haber tenido nuestro primer y único baile cuando yo no sabía bailar, admirar su profesionalismo y recibir sus consejos...
Y sí, se que en caso necesario estará como siempre, al alcance de un teclado, como hemos llevado nuestra amistad hasta hoy, pero el hecho de saber que no estamos ya en la misma ciudad y con ello murió finalmente la vana e insensata esperanza de ahora si reunir el valor de invitarle un café y salir un día... hace que hoy sea un día un poco triste... como guardando un poco el luto...